Complejidad, Educación y Transdisciplinariedad

Clarismar
Universidad Nacional Experimental de los Llanos Centrales
Rómulo Gallegos
Doctorado en Ciencias de la Educación
1ra Cohorte Valle de la Pascua




Transdisciplinariedad y Ciencias de la Educación.
Reflexión
Complejidad, Educación y Transdisciplinariedad
Raúl Motta



Facilitador:     
                                                    Participantes:    
Dr. Jorge Luis España    
Barrios, Tibisay  C.I.5622093

Del Valle, Numiralda C.I.8555147                                                           

 Hernández, ClarismarC.I14854132

 Hernández, Norka   C.I 9917526

Morabito, Concheta C.I 9918193
Sección “A”
Pérez; Yalis  C. I  12637560


Valle de la Pascua, marzo de 2012

Complejidad, Educación y Transdisciplinariedad

     Motta realiza este artículo en el intento de dar respuesta si  en educación es posible planificar y reflexionar sobre contenidos transversales, sin una aproximación transdisciplinaria sobre la complejidad de lo real. Motivado por una serie de conflictos y debates que se llevaron en esa época en torno a la transformación educativas y sus modalidades. Discurre que todos los esfuerzos realizados  a pesar de las diferencias en las posibles soluciones en las formas y caminos elegibles para su aplicación, parten del mismo diagnóstico. Considera obsoletos los distintos niveles educativos y de formación científica y tecnológica, y por los cambios emergentes en el orden social, profesional,  por causa de los profundos cambios económicos y culturales.

     En esta lectura, el autor hace énfasis en la necesidad de una gestión organizacional inteligente basada en un sistema integrado de formación aprendizaje de toda la comunidad educativa. Acota sobre la carencia de infraestructuras de los establecimientos educacionales y grandes equivocaciones en la parte de gestión y planificación. Hace observaciones en los esquemas perceptivos y organizacionales obsoletos en la formación docente y en la gestión institucional. Se observa un bajo nivel de formación epistemológica y metodológica en el tratamiento y procesamiento de la información y el conocimiento, que sea acorde con los niveles de gerenciamiento y expansión de los mismos en los sistemas de formación docentes.

     Otra observación de Motta con respecto al sistema educativo salvadoreño, es la  creciente descontextualización global/local en los docentes y en el personal jerárquico, directamente proporcional a la complejidad de los cambios socioeconómicos y culturales. La reconfiguración del paisaje social y económico se entreteje con la reestructuración de las formas de conocimiento, con sus medios de transmisión y con los modelos de articulación en los programas de estudio, en las disciplinas y sistemas de ideas.

     El autor enfatiza que en este estado cobran su verdadera dimensión, de una parte, el desafío de la articulación de los saberes, mediante un análisis crítico del surgimiento y el debate en torno a las nociones de multidisciplinariedad, interdisciplinariedad y transdisciplinariedad, en relación con el actual contexto de mutación global; y, de otra, la necesidad de ensayar distintas aproximaciones sobre las condiciones metodológicas que posibilitarían una verdadera práctica interdisciplinaria en educación.

     En el caso específico de la educación y la comunicación educativa, analizando escrituras de  Nicolescu (2001), donde plantea que la evolución transdisciplinaria de la educación debe verse de la siguiente manera: aprender a conocer, a hacer, a vivir en sociedad y a ser; ya que la educación  da lugar a una especialización de saberes y en cambio limitada a un ámbito de la vida. Dice también que la educación transdisciplinaria debe ir mas, desde el maternal hasta la universidad y en todos los ámbitos de la vida; haciendo así propiamente el nombre de universidad a una forma universal de educación, independiente del país en el que se encuentre, ya que hay un centro de común interrogación, que es la falla entre los valores y las realidades de un planeta cambiante.

     Actualmente los estudios sobre la transdisciplinariedad propiamente dicha suscitan un debate espinoso y conflictivo. La elaboración de proyectos transdisciplinarios corren el riesgo, por un lado, de transformarse en proyectos “integristas” es decir con la pretensión de una “metaciencia” que consiste en una visión totalizante de los saberes en este fin de siglo. Y por el otro, que los estudios y debates sobre transdisciplinariedad se transformen en el patrimonio de una “nueva disciplina”. Pero más allá de estas posibles patologías, la cuestión de la transdisciplinariedad no se reduce a ellas, ya que conlleva, en su debate, una riqueza auténtica que consiste en las problemáticas de la articulación, construcción, reorganización, transmisión, comunicación de los conocimientos en y más allá de las disciplinas establecidas. Cada una de estas problemáticas excede sus propios límites al situarlas en la actual revolución científica y tecnológica.

     Uno de los problemas que atraviesa el dominio de la educación global es el abismo entre los valores existentes, la capacidad político institucional para crear espacios de reflexión colectiva y la realidad de una vida planetaria en mutación. Si bien la adquisición del conocimiento científico debe pasar por un proceso de especialización, ésta no puede ser el final o el resultado de una educación acorde a la realidad global y errante. Es preciso equilibrar la explosión del conocimiento científico y su inscripción social con el fortalecimiento y la actualización de las potencialidades interiores del ser humano, y su presencia enraizada en una persona creativa, en un pensamiento colectivo inscripto a su vez en un proceso de democratización del saber.

    Motta recoge en este análisis la opinión de muchos investigadores de la interdisciplinariedad, multidisciplinariedad, Transdisciplinariedad como Borges, Morin,  Serres el cual subraya la emergencia de proyectos y propuestas  transdisciplinarias, junto a la maduración de las disciplinas, y a los esfuerzos inter y multi-disciplinarios, mostrarían la existencia de diferentes niveles de realidad regidos por diferentes lógicas. Es la percepción de que toda  tentativa de reducir la realidad a un solo nivel, regida por una única lógica, no sólo cierra las probabilidades del aumento del saber y de los conocimientos, sino que también es la fuente de la incomprensión y la violencia. El desarrollo de una sociedad en un mundo reticulado y basado en una interdependencia compleja depende de la rapidez y calidad del tratamiento de la información y el conocimiento, que no puede ser absorbido desde una actitud profesional y técnica.

Bibliografía

     Motta R, (1999). Complejidad, Educación y Transdisciplinariedad. Buenos Aires